Cuando una persona fallece, el proceso de herencia puede resultar complejo, especialmente si no se tiene claro quién tiene derecho a los bienes del fallecido. En el derecho español, existe la figura de los «herederos forzosos», quienes tienen asegurada una parte de la herencia por ley, independientemente de lo que diga el testamento. En este artículo, vamos a explicarte quiénes son estos herederos forzosos y qué derechos tienen en el proceso de sucesión.
¿Qué significa ser un heredero forzoso?
Vamos a empezar aclarando qué son los herederos forzosos. Este término se refiere a aquellas personas que, por ley, tienen derecho a recibir una parte de la herencia de un fallecido, independientemente de la voluntad expresada en el testamento. En otras palabras, son los beneficiarios que no pueden ser desheredados salvo en circunstancias muy específicas.
Los herederos forzosos están protegidos por el Código Civil (CC), que establece quiénes tienen prioridad en el reparto de la herencia. Esta figura es clave para garantizar que ciertos familiares queden protegidos financieramente, garantizando que reciban una parte mínima de los bienes del fallecido, conocida como legítima. Es por esto que a los herederos forzosos se les conoce también como herederos legitimarios.
En concreto, el CC, en su artículo 806, define la legítima como “la porción de bienes de que el testador no puede disponer por haberla reservado la ley a determinados herederos, llamados por esto herederos forzosos.”
¿Quiénes son considerados herederos forzosos?
Como establece el artículo 807 del CC, los herederos forzosos son:
- Los hijos y descendientes: Son los principales herederos forzosos. Si alguno de los hijos ha fallecido, sus descendientes (nietos) ocuparán su lugar.
- Los padres y ascendientes: Si el fallecido no tiene hijos o descendientes, el derecho pasa a los padres o, en su defecto, a los abuelos.
- El cónyuge viudo: El cónyuge sobreviviente también tiene derechos como heredero forzoso, aunque de forma limitada respecto a otros herederos. Generalmente, tiene derecho al usufructo de una parte de la herencia, es decir, puede disfrutar de ciertos bienes, pero no disponer de ellos libremente.
¿Qué derechos tienen los herederos forzosos?
Los derechos de los herederos forzosos varían en función de si se trata de descendientes, ascendientes o del cónyuge viudo:
-
Hijos y descendientes
En el caso de los hijos y descendientes, la legítima es de dos tercios del total del patrimonio del fallecido (artículo 808 del CC):
- Tercio de legítima estricta: Este tercio se divide equitativamente entre todos los hijos y descendientes, sin posibilidad de alteración por parte del testador.
- Tercio de mejora: El testador puede distribuir este tercio entre sus hijos y descendientes de manera desigual, para beneficiar a unos más que a otros, en función de lo que considere adecuado.
El tercio de libre disposición es el único del que el testador puede disponer libremente, dejándolo a quien desee, ya sea un familiar o una persona ajena a la familia.
-
Padres y ascendientes
Cuando no hay descendientes, la herencia pasa a los padres y ascendientes del fallecido, según lo establece el artículo 809 del CC. En este caso, los padres o abuelos tienen derecho a la mitad del patrimonio del fallecido.
Si hay un cónyuge viudo, los padres o abuelos solo tendrán derecho a un tercio de la herencia.
-
Derechos del cónyuge viudo
El cónyuge sobreviviente tiene un derecho especial en la herencia, que no se basa en una cuota de propiedad, sino en el usufructo. Los artículos 834 y siguientes del CC establece que el cónyuge viudo tiene derecho al usufructo de una parte de la herencia:
- Usufructo del tercio de mejora, si hay hijos o descendientes.
- Usufructo de la mitad de la herencia, si solo hay ascendientes.
- Usufructo de dos tercios, si no hay ni descendientes ni ascendientes.
Esto significa que el cónyuge viudo puede disfrutar de los bienes, pero no puede disponer de ellos como propietario.
Diferencias entre herederos forzosos y herederos voluntarios
A veces, es común confundir a los herederos forzosos con los herederos voluntarios. Los herederos voluntarios son aquellos a quienes el testador decide dejar parte de su herencia por voluntad propia y que no tienen un derecho legal garantizado. Los herederos forzosos son los que la ley obliga a proteger.
¿Qué sucede si no se respeta el derecho de los herederos forzosos?
Si un testamento no respeta la legítima de los herederos forzosos, estos tienen derecho a impugnar el testamento. Esto implica acudir a los tribunales para reclamar la parte de la herencia que les corresponde legalmente.
Por ejemplo, imaginemos que un padre fallece y, en su testamento, deja toda la herencia a una fundación benéfica, excluyendo a sus hijos. En este caso, los hijos pueden impugnar el testamento y reclamar la legítima.
¿Es posible desheredar a un heredero forzoso?
En principio, los herederos forzosos tienen derecho a su parte de la herencia por ley, pero existen situaciones excepcionales en las que es posible desheredar a un heredero forzoso. Los artículos 848 a 857 del CC establecen las causas por las cuales se puede desheredar a un heredero forzoso, entre las que se encuentran:
- Maltrato físico o psicológico al testador.
- Negación de alimentos al testador en situaciones de necesidad.
En conclusión, si bien el testador puede disponer de una parte de su patrimonio libremente, debe respetar las disposiciones legales relativas a los herederos forzosos, que son aquellas personas que la ley protege para que reciban una parte de la herencia, independientemente de lo que establezca el testamento. Estos incluyen principalmente a los hijos, padres y cónyuge del fallecido. La legítima garantiza que se respeten sus derechos, y aunque es posible desheredar, debe estar justificado conforme a las causas permitidas por la ley.